Texto Juan Cameroni / Imagen: Edicita Sarragoicochea
En geometría se define como una recta la menor distancia entre dos puntos: el punto A y el punto B.
Tendemos a desplazarnos de la misma manera. Queremos llegar al objetivo A estando en el punto B y tratamos de hacer la menor distancia posible, formando una recta.
Si uno ve un mapa de una provincia, o del país, las ciudades están conectadas por “pseudo-rectas”, porque por cuestiones geográficas existen leves desviaciones. En la ruta las vemos como curvas.
Lo que pasa, es que siempre seguimos esa recta: la menor distancia a nuestro punto objetivo.
Y nos olvidamos de todo lo demás.
La necesidad del bypass es la de poder trasladarse al punto A desde el orígen B, sin que implique recorrer necesariamente una recta o la distancia más corta.
Esto nos da la posibilidad de descubrir mundos enteros.
Quizás lo mejor está en esos bypass, en esos trayectos paralelos, en esos desvíos.
La monotonía de siempre recorrer un lugar, una ruta, durante años, un camino a un trabajo durante años y nunca bajarnos, corrernos, para ver un mundo a cinco minutos de nuestra recta, lleno de sorpresas y cosas por encontrar.
Por eso la necesidad del bypass.
El siguiente es un registro fotográfico de la artista Edicita Sarragoicochea, tomado en algún desvío, en algún mundo paralelo a cinco minutos de una ruta que nos lleva desde el punto A, al punto B.
Procedería en Pablo Acosta (pueblo de 30 habitantes)
Portal del Cementerio de Azul - Obra de Francisco Salomone